Lionesse/3
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Ajena a las maquinaciones diplomáticas y las artes oscuras del rey Casmir de Lyonesse, la princesa Madouc, determinada a conocer el secreto de su linaje, se aventura en una intensa búsqueda personal… que de algún modo se relaciona con el misterio de Dhrun, hijo de Aillas de Troicinet, de quien se ha profetizado que se convertirá en soberano de todas las Islas Elder.
Sinopsis de la novela en La Casa del Libro.
Y tras demasiado tiempo, iniciando la lectura de esta trilogía hace casi un año, siendo intercalados los tomos con numerosas lecturas, llegamos por fin al último tomo de la saga que nos presenta Jack Vance. Podéis encontrar los comentarios que hice al respecto de los dos volúmenes antecedentes aquí y aquí.
Creo que puedo afirmar que Madouc es un gran final de trilogía debido a que siguiendo las costumbres adquiridas en los tomos anteriores, el escritor se olvida del gran conflicto que sacude las islas Elder y se centra en un personaje sobre el que apenas había comentado nada al respecto a pesar de ser contemporáneo a Dhrun y que termina resultando en el mejor personaje de la saga: Madouc, la niña por la que las hadas sustituyen a Dhrun y es tomada por la hija de Suldrun, la heroína de la primera parte, se convierte en el eje sobre el que todo este relato gira y nos descubre que la impulsiva e inteligente niña hada convertida en princesa por la fuerza es una adolescente y, como a su supuesta madre, la intentan emparejar contra su voluntad para mayor beneficio de los planes del malvado rey Casmir.
Sin embargo, al contrario que la desdichada Suldrun, Madouc tiene un carácter indomable, no solo de palabra, si no también de acto y trae de cabeza a todos cuantos intentan domarla.
Seguimos durante numerosas páginas las aventuras de Madouc, descubriendo su origen feérico primero, para salir de palacio y buscar a sus verdaderos padres mientras a su alrededor se desarrollan, casi en segundo plano, los eventos que decidirán el porvenir de los distintos reinos de las islas Elder. Pronto el carisma y buen trabajo de Vance en el desarrollo de la protagonista tiene sus frutos y las entrañables aventuras de la falsa princesa eclipsan las distintas tramas que se habían ido desarrollando a lo largo de toda la historia. Ni los enredos políticos de Casmir, ni la amenaza Ska ni los tejemanejes de los magos importan tanto como las íntimas correrías de Madouc, su leal caballero Pom-Pom y del sabio Travante.
Sin embargo, no es oro todo lo que reluce. A mí parecer, los finales de Melancthe, convertida en un simple secundario que acompaña al malvado de turno, y de Pom-Pom que se merecía no ser despachado fuera del foco, no resultan satisfactorios. El tono de la obra, no casa con lo narrado: de nuevo el estilo juvenil casi fabuloso de la novela, choca con la trama, habiendo sucesos terribles narrados como si fueran actos inocentes.
Conclusiones
El camino para llegar a este tercer tomo se va haciendo cuesta abajo a medida que las páginas pasan para dejar un sabor de boca dulce con algún deje amargo. Es una lectura amena que se lee rápidamente, peculiar por su estilo pero que atrapa si entras en el juego de contrastes que plantea el escritor.
Sobre la trilogía
En su conjunto, la Trilogía de Lyonesse es una obra desconcertante en un primer momento. Empieza con un pesado volcado de información que puede abrumar al lector o hacerle perder la paciencia. Una vez superado este primer escollo, nos encontramos con un relato de intrigas políticas, guerra, personajes desafortunados, magos, hadas y ogros. Contándonos el destino de las islas Elder pero centrando el foco en diversos personajes. En el primer tomo, Aïllas y Suldrun son los personajes principales, siendo una obra más coral el segundo volumen, acaparando el protagonismo en el tercero la taciturna y carismática Madouc, conformando el mejor capítulo de la trilogía, superando por mucho a los dos que lo anteceden.
¿Ha valido la pena leer los tres tomos? Si nos tomamos los dos primeros como una introducción al tercero, pues sin todo el contexto, personajes y sucesos que nos cuentan, es imposible entender la tercera parte.
¿Hubiera sido más interesante que toda la historia se centrara en Madouc y recortar relleno? Probablemente concentrar el relato hubiera sido más directo, pero entiendo que el escritor no quería escribir una historia de una princesa rebelde, si no más bien de como las fantasiosas islas Elder consiguen la paz y usa como vehículo para ello a varios personajes que de una forma u otra tienen cierta relevancia.
Conclusiones de la trilogía
La Trilogía de Lyonesse tiene un sabor a fábula y cuento clásico que hace muy fácil su lectura pasado el primer cuarto del tomo uno. No se hace larga, pero en ocasiones se siente que el ritmo es irregular, acelerándose o ralentizándose de forma artificial, que unido a los cambios de punto de vista, algunas conveniencias y escenas y actitudes algo inocentes e infantiles de personajes adultos -el rey Casmir es un villano muy irregular, si me lo preguntáis- y el choque que produce que acciones dramáticas sean tomadas tan a la ligera pueden provocar rechazo y constituir un obstáculo para el disfrute de la historia, pero obviando estas apreciaciones nos encontramos con una lectura que puede resultar interesante si se le da una oportunidad.

- Edición original: Madouc Lyonesse 3 (1990)
- Edición reseñada: Madouc, Trilogía de Lyonesse (Gigamesh, 2016)
- Autoría: Jack Vance
- Traducción: Carlos Gardini
- Género: baja fantasía heroica
En una frase:
Buen final para una trilogía de novelas de fantasía clásica.